Tragedia con más de 200 muertos, mas de 100.000 vehículos destrozados, cultivos anegados, casas inservibles, plantaciones e invernaderos inutilizados y negocios arruinados.
Tardé mucho tiempo en decidirme a seleccionar y procesar estas fotografías, tomadas días después de las riadas, cuando los trabajos de recuperación ya estaban en marcha. Estas imágenes sólo representan una mínima parte del daño causado, y ni mucho menos en los lugares más afectados.
La lluvia borró los límites. La zona se volvió una sombra líquida que dejó caos y pesadumbre.




















